El aeropuerto de Ibiza está situado a 7 kilómetros de la ciudad y da servicio también a la isla de Formentera. Fue inaugurado en 1958 para el tráfico nacional y en 1966 se abrió también para el internacional, una vez realizada una ampliación de pista y construida la torre de control. Posteriormente ha sufrido diferentes ampliaciones y remodelaciones.

Ocupa el 9º puesto en el ranking de aeropuertos españoles (en 2019) y la OACI certificó en 2014 al aeropuerto de Ibiza como el más estacional del mundo. A pesar de la pandemia, IBIZA ha demostrado su potencial para todo tipo de turismo y en agosto ha superado ya el número de vuelos programados en 2019

El alto grado de estacionalidad del aeropuerto determina la plantilla de Iberia Airport Services (IBAS), que cuenta con entre 90 y 300 empleados (según temporada) para atender a las 13 compañías clientes que operan: Vueling, Iberia Express, Air Nostrum, Transavia, British Airways, Cityflyer, Volotea, Wizz Air, LOT, TAP, Chair, Neos, Ego Airways

Susana Espinosa, es la manager del aeropuerto de IBZ desde 2018 y ha desempeñado diferentes puestos en la compañía desde 1989, todos ellos en “primera línea de batalla”: “el gran reto de esta escala es, sin duda, gestionar la estacionalidad y pasar de 0 a 100 en cuestión de días. Mucha planificación y previsión para estar listos el primer día de temporada alta. Pero nuestra plantilla tiene esta forma de trabajar muy interiorizada y lo viven con mucha naturalidad. Choca más para al que viene de fuera ver como la ciudad se transforma completamente de un día para otro”

Roberto García Osorio, es supervisor en rampa y agente jefe según las necesidades de la operativa, y nos comenta que de su trabajo “¡me gusta hasta el olor del queroseno! trabajando en Iberia, me he dado cuenta de que nunca tienes que dejar de aprender, siempre hay que reinventarse.

Roberto es un enamorado de Ibiza y nos deja sus lugares preferidos en la isla:

  • Callejear por Dalt Vila, casco antiguo de la ciudad, durante el segundo fin de semana de mayo; se transforma en un mercado medieval, para celebrar la declaración como Patrimonio de la Humanidad.
  • Visitar algunas de sus mejores calas y playas: Cala Salada, Cala Saladeta, Cala Bassa, o Cala D´Hort, donde, justo frente a ella se ubica Es Vedrá, mágico y legendario islote de 382 metros de altura, protegido como reserva natural.
  • Contemplar el popular atardecer de la Cala de Benirras al son de los tambores hippies. Para mí uno de los mejores lugares donde ver la puesta del sol en Ibiza. Eso sí, un consejo, ¡llega temprano si no te quieres quedar sin sitio!

¿Te lo vas a perder?